MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El objetivo de la petición es concretar cuáles de las sociedades integradas en el conglomerado empresarial han sido enajenadas a la sociedad Back in Business, propiedad de Del Cabo, experto en empresas en quiebra que el pasado año se hizo a través de Posibilitum con Viajes Marsans.
Así como determinar la verdadera propiedad de las empresas incluidas en el acuerdo de compraventa, ya que este tipo de ventas en bloque las deben realizar los propietarios de las empresas y no sus administradores.
El bufete malagueño, responsable de la querella presentada contra la familia Ruiz-Mateos, explica que la venta del Grupo Nueva Rumasa no varía la situación de los inversores de pagarés ni tampoco libera a la familia Ruiz-Mateos de las obligaciones contraídas.
En este sentido, los expertos recomiendan a los afectados personarse en los procesos concursales de las distintas sociedades del grupo, así como adherirse a la querella por presunta estafa que tramita la Audiencia Nacional.
Además, fuentes jurídicas advirtieron de que aunque la familia Ruiz-Mateos haya dicho que seguirá respondiendo con los teóricos excesos de tasación derivados de la expropiación de Rumasa, esto es "solo es una entelequia y será difícil que existan y si existen que pudieran vincularse al pago de las inversiones realizadas en Nueva Rumasa".
El pasado viernes, la familia Ruiz-Mateos anunció la venta de Nueva Rumasa, actualmente en concurso de acreedores, a Back in Business. La operación se cerró por el importe de deuda de 1.500 millones de euros que suman las empresas del grupo, si bien el importe final dependerá de "los posibles acuerdos que se alcancen con los acreedores", explicaron.
El pasado mes de junio, el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz admitió a trámite la querella presentada contra Nueva Rumasa, José María Ruiz-Mateos, su mujer, Teresa Rivero, y sus seis hijos varones, por presuntos delitos de estafa e insolvencia punible. La Fiscalía Anticorrupción también mantiene su acusación.
