Fue juzgado la semana pasada después de que no aclarara quién le filtró el informe secreto de Gürtel que exhibió durante una sesión de control al presidente del Consell.
En su fallo, el tribunal considera "razonables" tanto las "hipótesis" del PP como las facilitadas por la propia defensa. Y ante la falta de "elementos probatorios" que permitan determinar si el síndico socialista tuvo la "finalidad" de ocultar un delito de revelación de secretos priman los principios de "duda razonable" y de "presunción de inocencia".
Aunque el tribunal ha fallado la absolución del dirigente del PSPV, no ha condenado al pago de las costas a la acusación que promovía el grupo parlamentario popular, al "no apreciarse en la actuación procesal de la acusación particular temeridad ni mala fe".