MADRID, 15 (EUROPA PRESS)
La Fiscalía General del Estado advierte en su Memoria de actividades correspondiente a 2010 que el riesgo de atentados en España por parte de grupos radicales islamistas "continúa siendo elevado" y que en nuestro país existe "una amplia red financiera y/o logística de apoyo a grupos terroristas, fundamentalmente indoasiáticos y del Magreb".
El Ministerio Público, que ha presentado este balance con motivo de la Apertura del Año Judicial, destaca que aunque no se disponen de "informaciones concretas que indiquen la inminente comisión de atentados terroristas en España", existen informaciones que indican que Al Qaeda y sus grupos afines podrían estar creando células activas e independientes en países de la Unión Europea.
Entre los factores que sitúan a España como potencial objetivo terrorista, la Fiscalía destaca los comunicados de grupos como Al Qaeda en el Magreb Islámico (AQMI) que citan a España o a organismos de los que forma parte, como la OTAN, la Unión Europea o la ONU. A ello habría que sumar la labor antiterrorista que se desarrolla en España, la numerosa comunidad que permanece en las cárceles de nuestro país y la presencia de tropas en conflictos como los de Afganistán o el Líbano.
AMENAZA EN EL MAGREB
De igual modo, la Memoria destaca la "alta probabilidad de ataques contra intereses españoles en el exterior", que podrían afectar tanto a las tropas españolas como a intereses particulares y diplomáticos localizados en Pakistán, Oriente Medio, la Península Arábiga o el norte de África.
En este territorio se destaca que las dificultades de AQMI en Argelia han supuesto "un incremento de la amenaza para Europa y para España", ya que la organización ha parecido "reforzar y/o precipitar su estrategia internacional" expandiéndose hacia países del Sahel y con la potencial decisión de atentar en suelo europeo.
REPUNTE DEL INDEPENDENTISMO GALLEGO
Además, la Fiscalía prevé que en el futuro continúen las actividades de grupos independentistas radicales como Resistencia Galega, que, según consta en la Memoria, "tienen capacidad para cometer atentados con explosivos y disponen de una estructura dirigente clandestina y de una cierta cantera de reclutamiento entre los independentistas radicales".
En relación con los GRAPO, la Memoria señala que el envejecimiento de sus principales miembros y el internamiento de la práctica totalidad de los mismos en centros penitenciarios hacen "muy difícil" la continuación de su actividad violenta, como demuestra el hecho de que su última acción con víctimas se remonte a febrero de 2006.
