Los magistrados de la Sección Octava de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo han decidido rechazar el recurso interpuesto por la magistrada y ha confirmado la sanción disciplinaria que le impuso el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en noviembre de 2009.
El Pleno del Consejo, además del año de suspensión, ordenó el traslado forzoso a más de 100 kilómetros de su actual destino, un extremo que también ha sido confirmado por el Supremo.
El Supremo considera probado que Barragán cometió dos faltas muy graves por abusar de su condición de magistrada para exigir un trato preferente y por inobservancia del deber de abstención.