A CORUÑA, 25 (EUROPA PRESS)
Ha sido en el juicio que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de A Coruña, tras un acuerdo entre las partes al reconocer los hechos el encausado por los que Fiscalía pedía inicialmente penas que suman siete años de cárcel. El Ministerio Público solicitó, además, la puesta en libertad del condenado, ahora en prisión, una vez que se firme la sentencia, cuestión que el Tribunal aceptó.
Los mismos se produjeron en la mañana del 2 de junio de 2024 cuando el procesado se desplazó a esta localidad coruñesa. Desde el lugar en el que estacionó su coche, observó a una menor de 12 años a la que comenzó a seguir. Ella, al darse cuenta, buscó refugio en el interior de un bar, al que entró el hombre y donde la siguió hasta la puerta de los aseos.
PERSECUCIÓN
Al salir, la niña comprobó que el acusado seguía en el bar motivo por el que pidió al camarero si conocía el teléfono del establecimiento donde trabajaba su madre para llamarla. Al desconocerlo, la menor se quedó en la barra, en la cual se situó el hombre por lo que ella optó por abandonar el local, momento en el que la sigue y la agarra del brazo.
"Con intención de privar de la libertad de deambulación a la menor y llevársela consigo puesto que su coche estaba aparcado a escasa distancia del lugar, ofreciéndole a la niña que se hicieran un selfie juntos y que fueran al coche". Sin embargo, la niña logra zafarse y pedir ayuda.
Una hora después, el procesado observó a una mujer, que se encontraba buscando una dirección, por lo que decide bajarse del vehículo. Después la agarra y trata de llevársela, aunque sin éxito al lograr escapar.
Fiscalía señala que el encausado "presenta un trastorno de personalidad y un historial de conducta antisocial sin sintomatología psicótica por lo que no alteran de ninguna manera sus capacidades intelectivas ni volitivas en relación con los hechos de este procedimiento".
