Expansion. 27.10.2011
Gay subrayó esta mañana en Cádiz que “el Tribunal Constitucional queda predeterminado por la ley de leyes, así como su número de magistrados, quien los nombra, cuándo se renuevan, y el orden constitucional hay que respetarlo”.
El vicepresidente del Alto Tribunal manifestó que “el cumplimiento de la Constitución es un deber de todos, pero especialmente de los poderes públicos”. Gay fue muy crítico con los que tienen la responsabilidad de hacer efectivo lo que marca la Constitución en materia del TC y no lo hacen. “Los plazos en la renovación de magistrados deberían ser cumplidos escrupulosamente y no hacerlo es vulnerar la Constitución, es hacer algo inconstitucional. Además renovando los magistrados se gana en independencia”.
Por su parte el presidente de la Sala Primera del Tribunal Supremo, Juan Antonio Xiol Ríos, afirmó que “el Tribunal Constitucional no puede entrar a juzgar los hechos, sino a interpretar el derecho”. Además apuntó que “a veces corremos el riesgo de al tener tantos recursos de amparo el TC se convierta casi en un tribunal de casación del Supremo y no pueda dedicarse a otras cuestiones”.
Xiol Ríos elucubró sobre cómo podría establecerse la relación entre el Supremo y el Constitucional y citó algunas de las propuestas que se han hecho en este tiempo como la supresión del recurso de amparo al Constitucional o filtros previos administrativos como paso previos al recurso de amparo. Pero Xiol Ríos apuntó: “No me parecen ninguna de ellas adecuadas”.
