Así lo ha anunciado el decano de los abogados valencianos, Mariano Durán, a través de un comunicado tras haber mantenido una reunión con abogados especializados en Derecho de Familia.
Ha expresado la "preocupación" de los letrados por el "previsible colapso que sufrirán los juzgados de Familia" ante la ley de relaciones familiares de los hijos cuyos progenitores no conviven. Uno de sus principales motivos de queja es la "deficiente situación" actual del gabinete psicosocial encargado de elaborar los informes a partir de los cuales el juez determina la idoneidad de la medida.
Asimismo critican la reciente reducción a la mitad del personal, que ha provocado que "ahora se tarde ocho meses en recibir el informe cuando antes se demoraba sólo unos dos meses".