LA UCO Y SU ORIGEN EN LA LUCHA CONTRA ETA
La Guardia Civil tuvo a la fuerza una gran escuela de investigación en la lucha antiterrorista, especialmente, en el norte de España. No solo se trataba de acabar con ETA, y defender la Seguridad Nacional, sino incluso de preservar sus propias vidas. Eso hizo que allí se formasen grandes investigadores en tareas de información.
La UCO, era una pequeña unidad de menos de 30 hombres que llevaba investigaciones generalmente en Madrid, hasta que asumió su mando uno de los guardias civiles más inteligente, astuto, y sagaz que he conocido. En los años que estuvo al frente llegó hasta los 400 componentes y, en la actualidad, esta cifra ha sido doblada.
Se supo entonces aprovechar la escuela de investigación formada en la lucha contra ETA y allí se incorporaron muchos de esos hombres. Al mismo tiempo, se empezó a tomar contacto con unidades policiales y servicios de información de todo el mundo: norteamericanos, franceses, portugueses, israelíes, etc... Todos ellos pudieron comprobar esa “escuela” que tuvo la Guardia Civil. Frente a conocimientos teóricos la realidad de la práctica. No olvidemos que una revista israelí definió, citando a fuentes oficiales, a la Benemérita, como la mejor unidad investigadora del mundo, y los israelíes si sabían de lo que hablaban.
La UCO desplegó unidades operativas en diferentes zonas y comandancias del Instituto Armado de toda España. A eso hay que añadirle la capacidad imaginativa propia de nuestro pueblo que tuvo que desarrollar.
Contaré una anécdota. Se planteaba el problema de cómo abordar a los barcos cargados de droga antes de llegar a puerto, los aviones americanos AWACS detectaban los barcos y la DEA informaba. La UCO se hizo con una lancha a la que llamaban “la Chaparita”, dado que los grandes barcos como “el Petrel” pertenecían a la Armada y, además, eran fácilmente detectables por los radares.
“La Chaparita” se aproximaba con dos o tres miembros de la UCO, y 10 o 12 de la Unidad Especial de Intervención (UEI), lanzaban una escalera solo de cuerda (no llevaba ni madera para no hacer ruido), abordaban el barco, detenían a los narcos, y entonces se acercaba “el Petrel” y cargaba los fardos y detenidos.
La UCO ha sido siempre una unidad de Policía Judicial, siempre ha trabajado a las órdenes de jueces y fiscales. A la UCO se incorporaron los mejores investigadores, hombres y mujeres que realizaron cursos con gentes muy preparadas y solo los mejores alcanzaron puestos de responsabilidad. Gentes que además tenían carreras civiles, que, en su mayoría, fueron sacadas muy brillantemente.
La UCO jamás ha actuado por intereses políticos, no le han dominado estos. A título de mero ejemplo: en una misma semana recibieron una felicitación por un informe del “caso ERE” y caras serias, por otro, de la “operación Púnica”.
La UCO gracias a un convenio con Justicia pudo utilizar material, como, por ejemplo, coches incautados a los investigados; se le dotó de medios técnicos muy avanzados para sus investigaciones, y sigue siendo en la actualidad una unidad que cuenta con reconocimiento mundial.
Ha evolucionado. Del enemigo asesino ha pasado a la lucha contra otro tipo de delincuentes, entre ellos la corrupción, pero también otros casos más anónimos.
Pese a ello, nunca olvidan su origen entre aquellos hombres que investigaban, incluso, por su propia supervivencia. Unas gentes que fueron claves en la derrota operativa de ETA. Se equivocarán quienes intenten desprestigiarla, ya que detrás de la UCO de hoy hay mucha escuela y mucha experiencia en situaciones límite.