VIGO, 8 (EUROPA PRESS)
En su fallo, la Audiencia consideró probado que el hombre en 2020, y de madrugada, aprovechó que la joven, entonces de 17 años, estaba durmiendo en la casa de su hermana, en Vigo, para realizarle tocamientos.
El acusado había estado consumiendo alcohol, principalmente cerveza, lo que veía a afectar levemente sus facultades volitivas superiores, limitando sus frenos inhibitorios", recogía también.
Ahora el TSXG argumenta que "si se aplican unas dosis mínimas de racionalidad a ese conjunto de componentes ensamblados entre sí, no existe otra hipótesis por igual válida epistemológicamente que la ofrecida por el tribunal de instancia al definir los hechos probados".