MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
El antiguo presidente de Viajes Marsans, Gonzalo Pascual, ha defendido ante el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz que el dinero de los clientes se destinó a tratar de salvar a la compañía y que ésta se vio abocada a la quiebra por la falta de financiación bancaria, según informaron fuentes jurídicas.
El socio de Gerardo Díaz Ferrán al frente de la compañía turística declaró este miércoles ante el juez durante una hora imputado por presuntos delitos de estafa y apropiación indebida de 4,4 millones de euros procedentes de los clientes del grupo Marsans. La querella la presentó el fiscal de la Audiencia Nacional Daniel Campos, quien considera que entre el 1 de marzo y el 31 de julio de 2010, el grupo Marsans formalizó reservas que dieron lugar a 7.560 depósitos de clientes, de los que 4.706 no han sido devueltos y se "destinaron a fines ajenos a la actividad del grupo".
Pascual, que evitó hacer declaraciones, explicó que el grupo Marsans funcionaba "estupendamente" hasta principios de 2010, cuando comenzaron a tener problemas de financiación por parte de los bancos, y que todo el dinero de las reservas de los viajeros fue destinado a pagar las deudas contraídas con los proveedores y con la Asociación Internacional del Transporte Aéreo (IATA).
El socio de Díaz Ferrán aseguró que ante la imposibilidad de hacer frente a los pagos en junio de 2010 se decidió vender la empresa a la sociedad Possibilitum Business, del experto en empresas en dificultades Ángel de Cabo, y que a partir de entonces él y su socio se apartaron de la gestión de la compañía. El administrador de esta sociedad, Iván Losada, también declaró este martes como imputado ante el juez.
Según explicaron fuentes jurídicas, la Fiscalía considera que desde noviembre de 2009 Viajes Marsans ya conocía sus problemas financieros y así quedó reflejado en el informe realizado por PwC, que evitó "expresar su opinión" respecto a los resultados auditados. Además, la sociedad patrimonial, Teinver, que ostentaba la propiedad del grupo Marsans, ingresó hasta 259 millones de euros procedentes de las empresas.
El fiscal sospecha que Pascual y Díaz Ferrán siguieron colaborando con Possibilitum Business tras la venta de la empresa y que Losada tomó decisiones en Viajes Marsans, así como en Teinver, antes de anunciar la compra en junio de 2010, al mismo tiempo que presentaron el concurso de acreedores. Además, también considera que puede haber más de los 4.706 clientes perjudicados por las empresas del grupo -Tiempo Libre, Rural Tours y Viajes Crisol- contabilizados en su informe, según fuentes jurídicas.
LOSADA PEDIRÁ EL ARCHIVO.
Por su parte, la abogada de Losada, Amparo Zapico, afirmó que pedirá el sobreseimiento de la imputación formulada contra su cliente porque los datos que maneja el fiscal son anteriores al último informe de calificación de la administración concursal del grupo Marsans y donde la presunta apropiación indebida ya ha quedado acreditada.
En este sentido, la abogada explicó que los cinco cheques por valor de 500.000 euros librados el 18 de junio de 2010 sacados de Viajes Marsans, a través de la sociedad Teinver, fueron destinados a pagar los gastos de los abogados que presentaron el ERE, al alquiler de las oficinas y a pagar a la IATA.
Durante su declaración y a preguntas del fiscal, Losada explicó que antes de trabajar con De Cabo su profesión era la de "electricista" y que entró en el grupo Marsans para realizar una "due diligence", así como que su finalidad siempre fue reflotar la compañía.
Según fuentes jurídicas, el fiscal basa su acusación en un informe realizado 'ad hoc' por los administradores concursales del grupo Marsans. Además, considera que Losada actuaba por orden de otras personas y que podría haber más salidas de dinero de Teinver de las detectadas.
Gonzalo Pascual comparte abogado defensor -Tomás Meliá- con Ángel de Cabo, imputado en el 'caso Nueva Rumasa'. Por su parte, Gerardo Díaz Ferrán, que declara mañana ante el juez, tiene el mismo abogado -Álvaro Garrido- que el colaborador De Cabo, Fernando Lavernia también imputado por Nueva Rumasa.
Viajes Marsans quebró en junio de 2010, dejando un déficit patrimonial de 271 millones de euros (373 millones si se tienen en cuenta sus filiales), ya que cuenta con un pasivo de 552 millones, frente a un activo de 281 millones de euros. Cuenta con 11.409 acreedores
