Considera Miguel Ángel Gimeno que con el apoyo de los poderes públicos el arbitraje como sistema de resolución de conflictos tendrá un crecimiento exponencial notable y tanta aceptación como los juicios rápidos y que el arbitraje sectorial, aquel ideado para un colectivo empresarial determinado, será el modelo a seguir.
Para el presidente de ACAM, es fundamental en el desarrollo de la llamada justicia alternativa que el empresario perciba que el arbitraje no es privativo de grandes empresas y desembolsos económicos notables.
Así, entiende que puede garantizar la supervivencia de muchas empresas que, metidas en litigios interminables, podrían tener dificultades económicas. Con la nueva Ley de Arbitraje se simplifican muchos los trámites para la puesta en marcha, desarrollo y ejecución del proceso arbitral.
Desde la asociación, se considera también necesario en ese arraigo del arbitraje en España, como ya sucede en otras naciones europeas, que se combine el consenso general entre todas las fuerzas políticas y sociales con una campaña divulgativa de la administración sobre los fines del arbitraje.
Así, la Asociación afirma que en un contexto donde la litigiosidad se ha incrementado notablemente, es razonable junto con el esfuerzo de los poderes públicos por mejorar la imagen y el funcionamiento de la justicia, apostar por las soluciones extrajudiciales de los conflictos.
En esta situación, el desarrollo del arbitraje y otros métodos alternativos a la justicia tradicional parecen clave en el deseo de que el ciudadano advierta las mejoras de la justicia y su funcionamiento como servicio público.
En nuestro país, la recién aprobada Ley de Arbitraje de 23 de diciembre del 2003, sustitutoria de la de 1988, viene a poner de actualidad la necesidad de crear un contexto estable y definido que sirva de desarrollo a este sistema de manera definitiva.
Desde ACAM, su director ejecutivo, Ignacio de Górgolas, considera necesarios diversos aspectos para que se implante de manera definitiva el arbitraje como sistema alternativo: el consenso general en la sociedad española, una campaña divulgativa de la Administración, el apoyo del colectivo de abogados, el fomento del arbitraje sectorial, la formación de árbitros, la especialización de los árbitros, la coordinación de las diferentes Cortes de Arbitraje, la proliferación del mercado del arbitraje y la aceptación de la cláusula de arbitraje y de la ejecución del laudo del árbitro.
ACAM, Asociación Comunitaria de Arbitraje y Mediación, es una asociación sin ánimo de lucro de proyección europea que funciona como Corte de Arbitraje en todo el territorio nacional. Su finalidad principal además es la del fomento de la mediación y arbitraje como métodos rápidos y económicos para resolver conflictos comerciales. En la actualidad ofrece sus servicios de asesoramiento en esta materia a cerca de un millar de empresas asociadas a esta entidad.
