RICHARD GARDNER, GRAN AMIGO
Richard Gardner fue un gran amigo de España, el mejor embajador americano que hemos tenido, juntamente con su mujer, Daniella Almeida, un espectáculo de alegría y cordialidad. Sería cosa buena organizar algún acto en el que se agradezca su labor y su ayuda y que permita de paso conocer la importancia de mejorar permanentemente nuestra relación con el país más poderoso del mundo, un tema que sigue siendo una asignatura pendiente de nuestra diplomacia y nuestra acción de gobierno.
Siendo ministro de Defensa Eduardo Serra, Richard Gardner fue una persona clave en la elección de España como sede de una reunión de la OTAN en 1997, y fue asimismo un defensor de incrementar nuestras relaciones políticas y económicas. Con motivo de la visita de Al Gore a España en el año 2005, y en una reunión en la Embajada a la que asistió José María Aznar, propuso la creación de la Fundación Consejo España-EE.UU., que ha sido y sigue siendo una institución privada que se ocupa eficazmente de propiciar un buen entendimiento entre los dos países.
Richard Gardner creía que España merecía tener una relación mucho más intensa y más positiva con su país, y en la primera reunión de la Fundación antes citada se mencionaron los siguientes argumentos:
-La presencia de bases militares en España que tienen un alto valor estratégico para los Estados Unidos.
-La importante presencia de España en Iberoamérica y su alta credibilidad política, que permitiría una acción conjunta de los dos países para afrontar los problemas más sensibles en esa área geográfica y muy en concreto en Cuba y Venezuela, con los que nuestro país tiene unos lazos especiales, históricos y culturales.
-La importancia en los Estados Unidos de una minoría hispana o latina que se ha convertido en la minoría mayoritaria, con más de cincuenta y siete millones de ciudadanos que han ido ganando influencia cultural y también política, porque su voto se ha hecho decisivo en las elecciones presidenciales.
Todos estos argumentos mantienen su vigencia y su fuerza en la situación actual. Desde entonces hasta hora, se han hecho avances en todos los terrenos incluyendo la actividad científica y cultural pero las posibilidades de mejora son ciertamente substanciales. La Embajada de Gardner permitió dar un salto espectacular en su tiempo. Merecerá la pena estudiar ahora cómo seguir su ejemplo.