MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
En este punto, fuentes jurídicas consultadas por Europa Press difieren de plano con la información aportada sobre lo ocurrido por la Generalitat de Cataluña, competente en las prisiones de dicho territorio, que asegura que Rull recibió un permiso extraordinario de urgencia por parte del citado juzgado de guardia a las cinco de la tarde y salió apenas veinte minutos más tarde de la prisión, para regresar dos horas después. Según el Supremo, dicha autorización judicial nunca se concedió porque dicho órgano no es el competente para ello.
El permiso permitió al preso por rebelión visitar a su hijo menor de edad en el hospital Sant Joan de Déu de Manresa (Barcelona), donde se encontraba ingresado tras haber sufrido un fuerte golpe en la cabeza al caer al suelo durante un vis a vis familiar con su padre la mañana del día 5 según fuentes penitenciarias catalanas.
La Sala que prevé juzgar a Rull y a otros once exmandatarios catalanes en la próximas semanas discrepa de la versión de la Generalitat y asegura que el permiso de juzgado de Manresa nunca se concedió, y que ha tenido conocimiento de todo lo ocurrido a posteriori. Por ello, estudia que acciones pueden emprenderse contra la dirección del centro de Lledoners.
Según los Servicios Penitenciarios catalanes antes de autorizar el permiso se dirigieron al Juzgado de Guardia de Manresa, que recordó que el Reglamento Penitenciario permite la concesión de permisos extraordinarios de urgencia, señalan.