MADRID, 9 Mar. (EUROPA PRESS) -
La elección de Enríquez parece cosa clara después de que el pasado martes obtuviera el aval de la Comisión de Nombramientos de la Cámara alta mediante el voto ponderado del senador del PP Antolín Sanz frente a la abstención del PSOE y el apoyo de los senadores catalanes al candidato del Parlament.
Además de Enríquez, que compareció como candidato de seis parlamentos autonómico, optaban al cargo el catedrático de Derecho Constitucional Antoni Rovira, propuesto por el Parlament de Cataluña y José Luis Costa, propuesto por la cámara autonómica gallega, que ex magistrado de lo contencioso en el Tribunal Superior de Justicia gallego y en la actualidad en el Consello Consultivo.
Para ser designado, el candidato a magistrado del TC deberá obtener el apoyo de tres quintos de la Cámara, mayoría con la que ya cuenta el PP sin necesidad del apoyo de otros grupos parlamentarios.
El nuevo magistrado tomará posesión de su cargo ante el Rey y permanecerá en el puesto el tiempo de mandato que le quedaba por cumplir a Hernando, es decir, hasta diciembre de 2016.
TRIBUNAL COMPLETADO
Cuando Enríquez tome posesión se convertirá en el duodécimo magistrado del Constitucional, un órgano que quedará completado de cara a próximas deliberaciones como la referida a la cuestión soberanista.
En el Pleno del TC convocado para la próxima semana este asunto no figura en el orden del día, según han señalado a Europa Press fuentes de este órgano, por lo que puede deducirse que se esperará a contar con este nuevo magistrado de tendencia conservadora para retomar formalmente un debate que se lleva produciendo de forma oficiosa en el tribunal de garantías durante las últimas semanas.
A mediados del pasado mes de febrero los once magistrados que componen hasta el momento el TC entraron a debatir de con carácter informal durantel el Pleno el recurso contra la declaración soberanista y, si bien no se llegó a acuerdo alguno, el debate permitió escenificar las diferencias que existen sobre este asunto,
De momento, el intercambio de impresiones ha servido`para que el magistrado que así lo considerara oportuno mostrara su conformidad o disconformidad con la ponencia de Adela Asúa, contraria a declarar la inconstitucionalidad del acuerdo del Parlament dado el carácter político del mismo. Es precisamente la naturaleza parlamentaria de la declaración lo que suscita más dudas entre los magistrados.
