BILBAO, 7 (EUROPA PRESS)
La presidenta de la Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV), Garbiñe Biurrun, ha considerado que el último decreto de modificación en la reforma laboral "establece una mecánica judicial más razonable" que puede "aligerar" el "montón" de demandas en casos de despidos colectivos y "compensar en parte" la posible "avalancha de litigios" derivados de la limitación de la ultraactividad.
En declaraciones a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, Biurrun ha explicado que realiza "una valoración, en general, bastante positiva" del "enésimo" real decreto sobre la reforma laboral, publicado este pasado sábado en el Boletín Oficial del Estado (BOE).
En este sentido, ha destacado que introduce modificaciones que "establecen una mecánica judicial más razonable que lo que se derivaba del panorama de la reforma laboral del año pasado". De este modo, ha indicado que se evita que "se tengan que interponer demandas individuales por despido cada vez que hay un despido colectivo ante las dudas que suscitaba la regulación anterior".
Según ha señalado, "ahora queda bastante claro que, si hay una demanda de conflicto de despido colectivo que se haya interpuesto por la representación legal o sindical de los trabajadores, hasta que no se solvente con sentencia firme o por acuerdo de conciliación, ese litigio de despido colectivo no empieza a contar el plazo de caducidad para que los trabajadores, individualmente considerados, puedan interponer sus demandas".
De esta manera, ha considerado que se "va a evitar ese montón de demandas de carácter cautelar que se estaban interponiendo ante las dudas que se suscitaban con la regulación anterior" como consecuencia de "esa poca técnica, de ese poco cuidado o mimo con el conviene siempre hacer las normas".
Además de "aligerar por lo menos el número de demandas en materia de despido", derivadas de despidos colectivos, ha opinado que se podría "compensar, en parte", la previsible "avalancha de litigios" como consecuencia de la modificación de condiciones de trabajo que podrían producirse por la aplicación de la limitación de la ultraactividad.
Biurrun ha señalado que, como consecuencia de la situación generada desde el pasado 7 de julio, se pueden dar "soluciones contradictorias dentro de los juzgados de una misma plaza", así como entre los juzgados de los tres territorios, y "puede ser que nuestra Sala dicte en conflicto colectivo inmediatamente, podría ser en el mes de octubre, alguna sentencia y que esto podría clarificar el panorama dentro nuestra comunidad autónoma".
Del mismo modo, ha indicado, puede haberlas entre las sentencias que se dicten en Euskadi y las de otras comunidades autónomas "e incluso con la propia Audiencia Nacional". Según ha añadido, "este panorama de contradicción está servido" porque la reforma en la ultraactividad de los convenios colectivos está dando lugar todavía a "muchísimas dudas interpretativas".
Aunque ha precisado que no dispone de datos al respecto, ha apuntado que "es perfectamente previsible que pueda producirse un incremento de las demandas tanto individuales en los distintos juzgados, como en la propia sala de lo Social si las demandas se presentan por la representación de los trabajadores en empresas determinadas de un ámbito superior en materia de conflicto colectivo".
"Sí puede producirse un aumento de litigiosisdad importante en este terreno", ha reconocido la presidenta de la Sala de lo Social, que ha recordado que el pasado año se produjo un incremento de trabajo en los juzgados "verdaderamente alarmante, sobre todo en Bilbao, de una manera ya muy difícil de afrontar" con "una respuesta judicial que se estaba ya demorando de manera excesiva hasta nueve y diez meses desde el momento de presentación de la demanda, cosa que era desconocida en esta comunidad".
En esta línea, ha lamentado que, pese a que "el año pasado con efecto de la reforma ya lo habíamos anunciado", no hubo "ningún estudio" ni "se ha interesado el Ministerio por crear nuevos juzgados o por apoyar", aunque "hay algunos planes de refuerzo" que, sin embargo, "son realmente mínimos".
"Si las cosas se hacen de manera improvisada, apresurada y sin mimo, las consecuencias son éstas: que la calidad de la justicia, por el retraso con el que se dicta ahora, por vez primera en hace muchos, también en la jurisdicción social, es una calidad rebajada", ha censurado.
NO HABRÁ "RESPUESTA UNIFORME"
En cualquier caso, ha apuntado que, frente a los casos que lleguen a los juzgados como consecuencia de la limitación de la ultraactividad, ha considerado que "no habrá habido una actuación uniforme de la patronal" y, del mismo modo, "tampoco habrá probablemente una respuesta judicial uniforme, sin perjuicio de que la respuesta sea una".
De este modo, ha explicado que "en un momento dado habrá un criterio unificado, pero probablemente tendrá efectos distintos en función de cuál haya sido la decisión de cada empresa".
