REFORMAR LA CONSTITUCIÓN: UNA REFLEXIÓN NECESARIA
El nuevo presidente del Gobierno desveló el propósito de acometer sin demora una reforma constitucional circunscrita a cuatro aspectos puntuales: la reforma del Senado, el reconocimiento de la igualdad de sexos en la sucesión de la Corona, la introducción de las denominaciones actuales de las Comunidades Autónomas y la específica alusión a la Constitución europea.
El autor, entiende sensatas y procedentes estas modificaciones pues algunas de ellas han sido largamente demandadas, sobre todo la que concierne a la configuración del Senado como Cámara de representación territorial.
Sin embargo, Carlos Carnicer afirma en su artículo que no comprende el porqué de la limitación, sino que defiende que se reforme todo lo que sea necesario, conveniente y bueno para España.
Así, el presidente del Consejo General de la Abogacía, piensa que el derecho a la salud o el de disfrutar de un medio ambiente adecuado para el desarrollo de la persona deben anteponerse y figurar entre los derechos y libertades del Capítulo segundo del Título I.
El método que Carlos Carnicer entiende como adecuado en la difícil y necesaria revisión del texto constitucional es el elegido por José Luis Rodríguez Zapatero, el del diálogo y consenso. Sin embargo, entiende que si se continúa manteniendo el ámbito restringido de su revisión existe el riesgo de que otras reformas necesarias tengan que esperar por lo menos hasta la próxima legislatura para llevarlas a cabo.
En conclusión, el autor considera que la Constitución de 1978 precisa de ser adecuada a la realidad social, y, por ello, cree conveniente analizar si existen más causas, que las apuntadas por el presidente del Gobierno, para reformar la Carta Magna.