El Proyecto del Gobierno no abordará reformas electorales ni tampoco la financiación local, por lo que las expectativas de acuerdo son prácticamente nulas, ya que el Partido Socialista considera requisito imprescindible que se aborden esas cuestiones, al igual que regímenes especiales para Madrid y Barcelona, o un mayor papel de las policías locales en la lucha contra la inseguridad.
La Proposición no de Ley del Partido Socialista incorpora su propuesta de elección directa de los alcaldes. Si ninguno obtuviera mayoría absoluta en la primera votación, que sería diferente a la de los concejales, la elección se dilucidaría en una segunda vuelta entre los cabezas de las listas que hubieran obtenido un mínimo del 15 por ciento de los votos.
Además, para Madrid, el Partido Socialista propone una Ley de Capitalidad, especial y diferente de la Ley de Grandes Ciudades.