El Decreto 139/2002 introduce modificaciones en la Consejería de Administraciones Públicas debido a la prestación por parte de la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha de nuevos servicios a los ciudadanos.
El Decreto autonómico presta especial importancia al Servicio de Protección Ciudadana, el cual, engloba actividades comunes en el ámbito de la protección civil.
Por otra parte, el Decreto 139/2002 da un nuevo impulso a las tareas de modernización de la Administración Autonómica, a sus mecanismos de control interno y, particularmente, a la prestación de los servicios públicos.
El Decreto 139/2002 perfila el ámbito competencial de la Consejería de Administraciones Públicas y redistribuye las funciones de los órganos gestores que han de integrar su estructura.