BARCELONA, 22 (EUROPA PRESS)
La consellera de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat, Gemma Ubasart; la presidenta del Consell de l'Advocacia Catalana (Cicac), Encarna Orduna; y el secretario de Medidas Penales, Reinserción y Atención a la Víctima, Amand Calderó, han presentado en rueda de prensa este viernes el acuerdo entre administración y abogacía para este cambio.
Ubasart ha expuesto que se trata de "una medida que puede parecer menor, pero que es histórica en el colectivo de la abogacía" por las trabas que esta restricción suponía para su trabajo, especialmente al preparar un juicio con preso preventivo dada la cantidad de documentación que conforma los sumarios, que pueden abarcar varios tomos con centenares de páginas además de fotos, vídeos y grabaciones.
La consellera ha destacado que se trata de "una medida pionera en el Estado" y ha valorado que supone un refuerzo de los derechos de los presos, por tener más garantías al preparar su juicio, a la vez que una mejora en las condiciones de los abogados y una contribución a modernizar el sistema penitenciario al permitir el acceso de la tecnología.
SIN INTERNET
El acceso de los ordenadores tendrá algunas limitaciones, que el departamento atribuye a garantías para la seguridad y la intimidad de los presos: no podrán conectarse a internet, ni grabar audio o video.
La medida ya se aplica desde el lunes en la cárcel de presos preventivos que esperan juicio, Brians 1; en octubre se aplicará en la cárcel de mujeres Wad-Ras, en Brians 2, en la prisión de Jóvenes, en Lledoners y en Mas d'Enric, y en noviembre, en Quatre Camins y en Ponent.
DERECHO DE DEFENSA
En el mismo sentido que Ubasart, Calderó ha valorado que esta medida "aportará una mejor atención al interno y mejor garantía del derecho de defensa", y ha destacado que se añade a la posibilidad, vigente desde 2017, de que los letrados contacten con los clientes en prisión por videoconferencia desde los colegios de la abogacía, una opción que el año pasado se utilizó 3.500 veces.
Ahora el departamento trabaja para que estas videollamadas puedan hacerse desde el despacho del abogado, y ha señalado que en 2022 hubo 23.300 visitas de abogados a clientes en prisión.
UN "HITO HISTÓRICO"
Para la presidenta de la abogacía catalana, la decisión anunciada este viernes es "un hito histórico" tras una larga reivindicación de la profesión, y ha aplaudido que Cataluña haya sido la primera comunidad autónoma en aplicarlo.
Aunque con ordenador, por ahora las visitas de los abogados seguirán siendo en los locutorios de la prisión, con un cristal entre el preso y el letrado, y en este sentido el abogado Carles Martínez ha valorado en declaraciones a los periodistas que lo "ideal" sería una sala donde puedan reunirse sin la separación del vidrio.
Martínez ha aplaudido que se permita a los abogados acceder con ordenador a las prisiones, y ha explicado que hasta ahora trasladaba en una maleta los sumarios para poder mostrarlo a sus clientes a través del cristal o entregárselo, y que en caso de vídeos, llamadas pinchadas o declaraciones de testigos debía relatar al cliente qué pruebas había en su contra sin que pudiera verlas directamente.
