MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Según el escrito de acusación de la Fiscalía, Goicoetxea formaba parte junto a Itor Esnaola, ya condenado por este asunto, del comando Erreka, que se integraba en la Estructura de Logística del Aparato Militar de ETA encargada del aprovisionamiento de armamento y explosivos para que los comandos armados puedan desarrollar sus actividades.
En el marco de una investigación sobre Erreka y a partir de cuantiosa documentación intervenida, se identificó como integrantes a los dos mencionados y se realizó una entrada y registro en la vivienda de Esnaola, un caserío que tenía anexo un zulo y donde se encontró junto a cuantioso material "para la elaboración, empaquetado y distribución de material explosivo empleado por ETA" y huellas de Goicoetxea.
Con el mismo resultado se practicaron registros en un caserón para ganadería anexo, en el Caserío Aldaola y tres zulos en Zegama, Lekumberri y Azpiroz, donde se encontró material explosivo y detonante, así como material documental e informático, que se suma al hallado en el domicilio de Goicoetxea.
Sobre este particular, la Fiscalía detalla el hallazgo de pegatinas con el anagrama de ETA y un poster con el de KAS, así como un pendrive con un programa de encriptación de documentos, y dos documentos que si bien no se pudieron abrir, llevan el mismo nombre que dos hallados a Esnaola con información sobre la ubicación de dos zulos que finalmente, no fueron localizados.
Para el Ministerio Público, Goicoetxea pertenecía a la estructura logística militar de ETA y era un activista legal en el seno del comando Erreka de 2001 a 2011, red desmantelada aquel año, cuando entró en la clandestinidad. Le acusa de un delito de depósito de explosivos y armas con fines terroristas como autor, por lo que solicita para él 9 años de prisión.