MADRID, 3 Oct. (EUROPA PRESS) -
Durante su discurso en el acto de Apertura del Año Judicial madrileño, Vieira ha asegurado en términos generales la Justicia madrileña "cumple su cometido de manera adecuada", pero ha criticado su "ingente carga de trabajo, sobre todo las jurisdicciones de lo Civil, debido a la demanda de los consumidores; y de los Social, por los problemas derivados de la crisis económica".
Así, ha indicado que el sistema judicial madrileño sufre una "fatiga generalizada", por lo que se requiere la superación de "esquemas tradicionales"; y acusa una "tensión profesional creciente" porque los trabajadores de la Justicia no han recuperado algunos derechos y permisos perdidos en la crisis.
"Algunos ya me han oído hablar de la necesidad de aprovechar la potencialidad del gran número de Juzgados madrileños para lograr una mayor especialización y reducir así el esfuerzo de jueces, magistrados y todos los funcionarios de la Administración de Justicia.
Por ejemplo, desde julio del año pasado por las demandas de préstamos de garantía hipotecaria se creó el juzgado 101, que aún no ha logrado resolver mayor número de asuntos de los de ingresa. Su existencia es cuestionado por algunos pero ha permitido aplicar métodos modernos y eficaces como emplazamiento por vía electrónica, la distribución del trabajo en la Oficina Judicial, la consulta por expediente electrónico o la organización colectiva de trabajo, métodos que se pueden trasladar a otros órganos, superando el inmovilismo que muchas veces atenaza a las instituciones", ha manifestado.
Vieira cree que en la segunda instancia judicial debe cambiar el "modelo decimonónico" de funcionamiento de "tribunales aislados" favoreciendo la unificación de criterios para lograr decisiones homogéneas. "Tiene que cambiar el papel de los presidentes de Sección, que deben estar para la atención de los criterios discrepantes para que haya una mayor predictibilidad en las decisiones. Todo ello sin perjuicio de las necesarias medidas que eviten el bloqueo de la Administración de Justicia, como la obligatoriedad de presentación de demandas colectivas o procesos piloto de aplicación al resto de las demandas", ha esgrimido.
Por otro lado, el todavía presidente del TJSM ha reclamado más atención a los Juzgados de Tutelas e Incapacidades debido al envejecimiento de la población española. Este juzgado especial existe en el partido judicial de Madrid, pero no en el resto de la región. Los Juzgados de Tutelas atienden la declaración de incapacidad de personas y ratifican los internamientos urgentes por razones psiquiátricas. A su juicio, deberían estar dotados de auditorías para gestión de patrimonio en riesgo de malversación y debería haber una especialización de ámbito regional.
Vieira ha exigido también una mejor gestión de las Oficinas Judiciales para que sean más eficaces y se reestructures las plantillas de funcionarios "para evitar el desequilibrio existente entre unos y otros". "Es la triple dependencia administrativa es uno de los factores que más ralentizan el funcionamiento de la Justicia. Hay que reclamar que al menos los letrados dependan del CGPJ, que sería más respetuosos por la separación de poderes", ha añadido.
El presidente del TSJM se ha alegrado de que exista una Consejería solo de Justicia en la Comunidad y ha agradecido al presidente regional, Ángel Garrido, el "cambio sustancial" que se ha dado en esta legislatura a este ámbito, "con más presupuesto y la creación de una Mesa de Justicia. "Ahora se ha promovido con más ímpetu las medidas de mejora. Con este impulso y el apoyo de todos los grupos políticos se logrará en pocas legislatura poner a la Justicia madrileña en el liderazgo nacional", augura.
VIOLENCIA DE GÉNERO Y ATAQUES A LA CONSTITUCIÓN
Vieira también ha tenido palabras para el drama de la violencia de género, que "hace cuestionar la eficacia de la Justicia", con dos años de demora en estos casos en la sección de la Audiencia Provincial. "A pesar de la especialización creciente, nos vemos sorprendidos por sucesos brutales, con muertes despiadadas de menores para hacer frente a esta lacra social.
Cuando la intervención judicial no ha servicio para reducir el peligro hay que explorar nuevas medidas, como más medios para poder detectar prematuramente situaciones de riesgo de violencia", ha apuntado.
Por otro lado, el presidente del TSJM ha señalado que se últimamente se viven con más ímpetu casos de crispación social.
"Estamos asistiendo a un maquillaje de principios para justificar el desprecio a la legalidad. La postverdad ha llegado aquí también con unos planteamientos tramposos con la apariencia de novedosos. Hay una campaña de desprestigio puesta en marcha gracias a las nuevas tecnologías para manipular la información", ha expuesto.
En este panorama, ha apostado por la "firmeza" de la Justicia, la "confianza" en la actuación de los tribunales y la "aplicación estricta" de la Ley, "garantías contra estos ataques a la democracia". Para Vieira, la neutralidad judicial no pude ser "inmune" ni tolerar el incumplimiento de las leyes, aunque vengan aparadas por "ideologías o movimientos de masas".
"A un pueblo hay que ganarlo con respeto. Ganemos el respeto del pueblo sin engaños, con la verdad y ejemplaridad pública. Y con el acatamiento de las normas aprobadas", ha concluido.