MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
La Sala de lo Contencioso-Administrativo ha desestimado el recurso interpuesto por Khaled Salem contra el acuerdo adoptado el 2 de septiembre de 2011 por el Consejo de Ministros al entender que éste es "ajustado a derecho" en los extremos cuestionados.
En concreto, Salem impugnó la decisión del Gobierno por su falta de motivación, por su nacionalidad española y por la naturaleza de los delitos imputados que, consideraba, tenían un "carácter político". Solicitaba tener en cuenta además la "situación revolucionaria" en la que se encontraba su país.
En sus alegaciones, el recurrene entendía también que el acto del Consejo era nulo puesto que los hechos de los que se le acusaba estaban siendo enjuiciados por un tribunal español, en concreto por la Audiencia Nacional.
La sentencia del Supremo, de la que ha sido ponente el magistrado José María del Riego, responde que los hechos que se le imputan corresponden a un delito de blanqueo de capitales y que el acto recurrido cumple con los requisitos exigibles para la entrega a su país.
En relación con la nacionalidad española, indica que esta cualidad debe ser apreciada por el tribunal competente para conocer la extradición. El Pleno de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional ya confirmó el pasado mayo la entrega a Egipto del empresario Hussein Salem, vinculado al expresidente Hosni Mubarak, y de los hijos del industrial, Khaled y Magda, relacionados con la comisión de delitos económicos durante el régimen.
TRAMA PARA BLANQUEAR DINERO EN EL EXTRANJERO
El Consejo de Ministros acordó en septiembre de 2011 continuar con el proceso de extradición de los hermanos Magda y Khaled Salem por ser sospechosos de haber creado una trama para blanquear en el extranjero grandes cantidades de dinero obtenido de forma ilícita en Egipto. 'Lavaron' el capital gracias a las influencias de su padre con el expresidente egipcio Hosni Mubarak.
Los dos reclamados son hijos de Hussein Kamal el Din Ibrahim Salem, contra el que también se seguía un procedimiento de extradición por soborno, tráfico de influencias y por causar pérdidas para los fondos públicos en Egipto, utilizando sus influencias personales con Mubarak, según las autoridades de ese país.
A los hermanos Salem se les acusa de blanquear grandes cantidades de dinero que les enviaba su padre desde Egipto a sus cuentas ubicadas principalmente en los Emiratos Árabes Unidos, Suiza, España y los Estados Unidos.
Además, se dedicaban a cambiar a moneda extranjera los fondos procedentes de Egipto. La cantidad defraudada asciende a unos dos mil millones de dólares, que se blanquearon en el periodo comprendido entre el año 2007 y el 22 de junio de 2011.
La solicitud de extradición proviene de la Embajada de Egipto, en virtud de orden de arresto contra los dos hermanos emitida el 14 de julio de 2011 por el Fiscal General del Estado de ese país para su posterior enjuiciamiento por un delito de blanqueo de capitales.
A los hermanos Salem se les decretó prisión provisional con fianza de cinco millones de euros por el Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional tras ser detenidos en julio de 2011 en España.
