La Sala de lo penal del Supremo estima parcialmente el recurso del detenido contra la Sentencia dictada en noviembre de 2009 por la Audiencia de Madrid, que absolvió a los agentes y condenó al recurrente al pago de una multa de 60 euros por una falta contra el orden público.
El Supremo condena a los a dicha pena y al pago de una indemnización de 7.808 euros por un delito de lesiones con la agravante de abuso de autoridad. Además, declara la responsabilidad civil subsidiaria del Ayuntamiento de Madrid.
El Alto Tribunal concluye que "la versión del recurrente se ve corroborada por los partes médicos, que deben de ser considerados como documentos que acreditan el error del juzgador".
Asimismo añade que se trata de un "grave comportamiento, que menoscaba la dignidad e integridad exigible a los funcionarios encargados de hacer cumplir la Ley".