Estas plazas quedaron pendientes cuando se removió al fiscal jefe Anticorrupción, Carlos Jiménez Villarejo, y al fiscal jefe de la Audiencia de Madrid, pero el Ministerio de Justicia no renovó la del Tribunal Superior de Galicia, cuyo jefe, Ramón García Malvar y Mariño, tiene que acabar de cumplir una sanción por falta muy grave antes de su jubilación, el próximo 31 de diciembre.
La convocatoria de las veintidós plazas de fiscales jefes se produce después de que el pasado jueves los portavoces del Partido Socialista e Izquierda Unida criticasen al Fiscal General del Estado, Jesús Cardenal, las prisas por remover a los fiscales y la paralización en las renovaciones de las Audiencia Provinciales, previstas para el pasado septiembre.
Respecto a la Fiscalía de Galicia, el portavoz de Izquierda Unida, Luis Carlos Rejón, interpeló a Jesús Cardenal por retrasarse en su renovación.
A Ramón García Malvar y Mariño le quedan por cumplir seis días de la sanción de cuatro meses que le impuso Jesús Cardenal por retrasar el visado de un informe fiscal.