La Ley 16/2002 reforma y moderniza las estructuras comerciales e incide en la participación de los agentes sociales intervinientes en este sector, así como en la defensa de los consumidores.
La Ley, dentro del respeto a la legislación estatal reguladora del comercio minorista, atiende las peculiaridades propias de la Comunidad Autónoma de Castilla y León y su realidad socioeconómica en el ámbito comercial.
Asimismo, la Ley de Comercio de Castilla y León ha tenido en cuenta la normativa comunitaria sobre la materia de comercio.
El objetivo que persigue la Ley 16/2002 es agrupar los contenidos regulados en distintas normas hasta ahora vigentes, y además dar efectividad a la plena asunción de la competencia que sobre esta materia establece el Estatuto de Autonomía de Castilla y León.
Pretende también la nueva Ley potenciar la colaboración de la Administración Regional con todos los sectores afectados para la consecución de la reforma, la mejora de la competitividad, la racionalización y la creación de empleo en el sector.
Como novedad cabe destacar que la Ley 16/2002 obliga a que obtengan licencia comercial los establecimientos comerciales colectivos que encajen en la definición que la misma contempla.
La Ley Orgánica 4/1983, de 25 de febrero, de Estatuto de Autonomía de Castilla y León puede consultarse en el Libro Segundo del Repertorio de Legislación vigente de Iustel.