EL EJIDO (ALMERÍA), 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
A preguntas de los medios en El Ejido (Almería), la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, ha señalado la acción coordinada entre las tres comunidades autónomas para evitar el "recorte" del trasvase "en estos momentos de sequía", sentido en el que espera que las medidas cautelares solicitadas "sean consideradas" por el tribunal.
La decisión avalada por los servicios jurídicos de la Junta de Andalucía van en una "línea común" con las otras dos comunidades autónomas levantinas en una muestra la alianza entre los territorios para defender la "solidaridad hídrica".
Crespo ha incidido en las posibilidades de éxito que supone concurrir conjuntamente con el resto de comunidades afectadas por la minoración del trasvase como consecuencia del aumento del caudal ecológico "sin aval científico", lo que, según estiman desde la Junta, puede derivar en un grave impacto socioeconómico y ambiental para los territorios del Levante.
El impacto del aumento a 8,6 hectómetros cúbicos de los caudales ecológicos se traduce, según los cálculos de la Consejería de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, en la pérdida de 3.500 empleos, la puesta en peligro de la supervivencia de 24.000 hectáreas de cultivo en el territorio provincial almeriense, así como pérdidas de la actividad económica y empresarial del orden de más de 264 millones de euros.
A ello se suma que del trasvase Tajo-Segura depende en buena medida el abastecimiento de 130.000 almerienses. Crespo ya ha abogado por un trasvase "solidario" dado que "significa mucho para una tierra, como es el Levante almeriense, que presenta un déficit hídrico en estos momentos de más de 70 hectómetros cúbicos" y que arrastra el corte total del trasvase del Negratín, los 15 hectómetros cúbicos de recorte del Tajo-Segura y la menor disponibilidad hídrica también por la sequía.
