BRUSELAS, 4 Feb. (EUROPA PRESS) -
Tan sólo Grecia, Hungría y Finlandia han comunicado al Ejecutivo comunitario la trasposición de esta normativa, algo que todos los socios debían hacer antes del 21 de diciembre del pasado año, por lo que ha abierto procedimientos de infracción al resto de Estados miembros.
La apertura del expediente es un primer aviso a las capitales para que aceleren la aprobación del código, que Bruselas considera "fundamental" para "lograr la sociedad europea del gigabit" y "garantizar una participación plena de todos los ciudadanos de la UE en la economía y la sociedad digitales".
La Comisión Europea puede dar un paso más y dar un últimatum a los gobiernos que sigan sin trasponer la normativa en los próximos meses antes de elevar el asunto al Tribunal de Justicia de la UE (TUE) si lo considera pertinente.
El código europeo de las comunicaciones electrónicas moderniza el marco europeo para "mejorar las opciones y los derechos de los consumidores", ha destacado el Ejecutivo comunitario, que añade que la normativa "garantiza contratos más claros, la calidad del servicio y unos mercados competitivos".
Otro aspecto que Bruselas destaca del nuevo marco es incentiva a los operadores a realizar inversiones en redes "de muy alta capacidad", así como que ofrece "una mayor previsibilidad normativa" para facilitar "servicios e infraestructuras más innovadoras".
