MADRID, 26 Nov. (EUROPA PRESS) -
Según informaron a Europa Press en fuentes financieras, este importe corresponde a los contratos de apoyo que ambas constructoras firmaron con los fondos, que incluían una serie de garantías de pago en caso de quiebra, que es lo que finalmente sucedió.
Una vez que entraron en concurso, las empresas recurrieron a los tribunales argumentando que estos contratos de apoyo no eran válidos, algo que también hicieron los fondos, quienes obtuvieron un fallo favorable del Tribunal Supremo defendiendo que estas firmas tienen la capacidad jurídica de exigir estas garantías.
De esta forma, la Audiencia Provincial de Madrid, siguiendo con esta jurisprudencia, dictaminó el pasado mes de octubre que estos contratos son válidos y Sacyr y Ferrovial deberán pagar 23 millones a los fondos acreedores, según adelanta 'Expansión'.
En concreto, Cintra, filial del grupo que preside Rafael del Pino, tendrá que desembolsar 15 millones de euros, mientras que Sacyr hará lo propio con 8 millones de euros, según las fuentes consultadas por Europa Press.