BRUSELAS, 12 Ene. (EUROPA PRESS) -
El tribunal con sede en Luxemburgo ha desestimado el recurso de casación presentado por el grupo galo, al que la Comisión acusa de haber sido parte del pacto ilegal entre 1993 y 2004.
En concreto, el Ejecutivo comunitario concluyó que las empresas se repartieron cuotas de venta por región y por cliente, y coordinaron entre sí los precios y, en algunos casos, las condiciones de venta.
En el cartel, que duró en total cerca de 30 años, también estuvieron implicadas y fueron sancionadas por Bruselas la española Ercos y la estadounidense FMC Corporation, incluidas sus filiales española (FMC Foret) y holandesa.
Todas las empresas, a excepción de Roullier, se beneficiaron de una reducción del 10 % en la cuantía de la multa, al aceptar las acusaciones y compromisos obligatorios. El grupo galo, sin embargo, rechazó participar en ese proceso de transacción, por lo que se le aplicó el protocolo ordinario que no prevé rebajas en las sanciones.