En las mismas aulas del Instituto Nacional de la Administración (INAP) en las que él mismo ingresó en el año 1985, hoy ha destacado la importancia de este cuerpo como uno de los elementos de calidad que nuestro país tiene para afrontar los retos planteados por la crisis o los que representa la adaptación permanente al cambio social y económico.
Catalá ha manifestado ante los nuevos miembros del cuerpo de Administradores Civiles del Estado que el Ministerio se propone reforzar la Justicia como un servicio público ágil, eficiente, de calidad y cercano al ciudadano del siglo XXI. El ministro ha destacado la necesidad de innovar y liderar un cambio transcendente del servicio público en una sociedad cuyas demandas principales son la transparencia en la toma de decisiones, la participación del ciudadano y la necesidad de fortalecer la democracia.
En este sentido, Catalá ha subrayado las numerosas iniciativas de reforma del sector público realizadas por el Gobierno en los últimos años, por ejemplo a través del Grupo de lnvestigación de la Administración Pública o la Comisión para la Reforma de la Administración Pública (CORA).
Estas reformas, además de un muy considerable ahorro, han servido para aplicar criterios de gobernanza pública, reducir y simplificar procedimientos, eliminar trámites burocráticos innecesarios o duplicados y apostar por la digitalización de la sociedad, a través del impulso de la Administración electrónica con medios que garanticen la interoperabilidad de los sistemas.
En relación a la incorporación de la Administración de Justicia a este esfuerzo general de modernización, Rafael Catalá ha manifestado el firme compromiso del Ministerio para reforzar la Justicia como servicio público, orientándola al ciudadano del siglo XXI a través de un proceso de adaptación a las nuevas demandas y hábitos de acceso de los usuarios de la misma.
