MADRID, 24 Jul. (EUROPA PRESS) -
El Pleno del Tribunal Constitucional ha reelegido este martes al progresista Pascual Sala como presidente del alto tribunal y ha nombrado a Ramón Rodríguez Arribas, magistrado de tendencia conservadora, como vicepresidente de esta institución.
Pascual Sala Sánchez ha puesto este martes su cargo a disposición del Pleno para su confirmación o remoción. Los magistrados han ratificado en votación secreta que siga al frente del alto tribunal.
Tras ello, los doce magistrados del Pleno han elegido a Ramón Rodríguez Arribas como vicepresidente en sustitución del nacionalista Eugeni Gay, cuyo cese fue publicado el pasado sábado por el Boletín Oficial del Estado (BOE), junto al de los magistrados Javier Delgado y Elisa Pérez Vera.
Los magistrados nombrados a propuesta del Congreso de los Diputados y pactados entre PSOE, PP y CiU Juan José González Rivas, Andrés Ollero, Encarnación Roca y Fernando Valdés cubrirán estas tres vacantes junto con la que dejó Roberto García-Calvo, fallecido en mayo de 2008.
Pascual Sala y Ramón Rodríguez Arribas, jueces ambos de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo, accedieron a la vez al Tribunal Constitucional tras ser elegidos por el Pleno del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) en 2004.
Sala, expresidente del Supremo y del CGPJ, ascendió a la presidencia del Tribunal Constitucional en enero de 2008 tras ser elegido en segunda votación con seis votos a favor. Se trataba de la primera vez en que un magistrado de Carrera presidía el TC, que hasta la fecha siempre había estado regido por un catedrático.
SOBRESALIENTES Y MATRÍCULAS DE HONOR
Ramón Rodríguez Arribas (Madrid, 1934) terminó sus estudios de Bachillerato con calificación de sobresaliente en todas las asignaturas y matrícula de honor general en todos los cursos.
En 1957 culminó la Licenciatura en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid, con el premio de la Fundación "García Iguren" y siendo el tercer expediente de su Promoción, con doce matrículas de honor y cinco sobresalientes.
Tres años después, Rodríguez Arribas cursó estudios de Doctorado en la Complutense obteniendo la calificación de sobresaliente en todas las asignaturas.
En 1958 sirvió como secretario judicial por oposición en el Juzgado de primera Instancia e Instrucción de Castellote (Teruel) y dos años más tarde ingresó en la Escuela Judicial 10.ª Promoción, con el número 3 de Jueces.
En 1962, fue destinado como juez de primera Instancia e Instrucción en Riaza (Segovia), dos años después trabajó como juez de primera instancia en Escalona (Toledo) y en 1970 desempeñó esta labor en el municipio toledano de Torrijos.
Ascendió a la categoría de magistrado en 1976, año en el que fue nombrado Juez de Instrucción núm. 2 en Las Palmas de Gran Canaria. Un año después, trabajó como magistrado-juez de primera Instancia e Instrucción en Ciudad Real y en 1979 como magistrado-Juez de primera Instancia número 19 en Madrid, donde llegó a dictar 1.500 sentencias de estudio. En 1981 fue juez especial de la Quiebra de la Naviera Letasa.
En 1983 trabajó como inspector-Delegado del CGPJ; ocupándose sucesivamente de la Zona Centro y de Cataluña con más de 200 juzgados inspeccionados, en 1987 fue magistrado de la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia de Madrid y en 1991 fue presidente de la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Madrid, interviniendo en más de 12.000 sentencias, de las que en 1.600 lo hizo en calidad de ponente.
Desde Octubre de 1995 es Magistrado de la Sala Tercera del Tribunal Supremo, cargo que ocupa en la actualidad, habiendo intervenido en más de 6.000 sentencias, de las que en 1.300 lo fue como Ponente. Y desde 2004 es magistrado del Tribunal Constitucional tras ser nombrado por el Consejo General del Poder Judicial con 19 votos favorables de los 20 vocales.
Rodríguez Arribas fue presidente de la Asociación Profesional de la Magistratura (APM) desde febrero de 1990 hasta octubre de 1997 y presidente de la Unión Internacional de Magistrados en 1996.
Es el primer español que ha ocupado dicho cargo en los 50 años de existencia de esta ONG de la Naciones Unidas, habiendo sido redactor y ponente del Estatuto de los Jueces en Europa e interviniendo en ponencias del Estatuto del juez iberoamericano y en el Estatuto Universal del juez.
