ALMERÍA, 16 (EUROPA PRESS)
Fuentes judiciales han informado a Europa Press de que José O.G., quien enfrentaba sendas penas de cinco años de prisión por delitos de malversación de caudales públicos y falsedad, ha mostrado conformidad, asimismo, con los seis años de inhabilitación especial para empleo o cargo público.
La acusación particular, ejercida por el Consistorio y que interesaba hasta 18 años de cárcel por los hechos, ha trasladado al tribunal que, dado que el acusado había reconocido su culpabilidad y se había comprometido a reponer la cantidad malversada, se adheriría a lo solicitado por el Ministerio Público.
José O.G. desempeñó funciones de secretario-interventor accidental en el Ayuntamiento de Las Tres Villas, en el que asumió labores relativas a la contabilidad, confección de mandamientos de pago o control de tesorería entre otras, tareas de las que, pese a dejar el cargo en enero de 2006 en favor de una funcionaria, se siguió ocupando.
Según consta en el escrito de acusación, "aprovechando su posición", el acusado organizó una sistema "destinado malversar sistemáticamente y permanentemente los fondos municipales" mediante la "apropiación continúa" de cantidades "pequeñas o medianas a fin de no llamar la atención" y a través de "diversos artificios".
Con este sistema, entre los meses de noviembre de 2005 y de junio de 2006, "se apropió con ánimo de lucro o hizo que un tercero se apropiase" de un total de 15.829,78 euros en cuantías que oscilaron entre los 3.208,14 euros y los 243,63 euros.
Las facturas y recibos falsos confeccionados correspondían a una empresa de venta de materiales de construcción, a suministros de combustible o a un comercio de artículos para fiestas, entre otros. Algunos de los ingresos procedentes de mercantiles y particulares se realizaron directamente en su cuenta bancaria particular.
José O.G. falseó varios mandamientos de pago "faltando a la verdad en la narración de los hechos al hacerlos corresponder bien con facturas que habían sido anuladas por sus emisores y cuyo importe no era debido a los mismos, o bien con facturas falsas confeccionadas por él".
El sistema ideado por el exsecretario y exinterventor municipal incluía el hacer constar "falsamente" en los mandamientos que los emisores de las facturas habían recibido los pagos ordenados, por lo que "también falseaba a este objeto las matrices de los pagarés utilizados como medios de pago".