Tras admitirse la abstención, el sector progresista deja de contar con el voto de calidad de Casas como presidenta y, en el caso de empate, dicho voto de calidad podría ser emitido por el magistrado conservador Vicente Conde, que asume la presidencia por ser el más antiguo.
Tras la votación, se encomendó a Pérez Tremps la redacción de un nuevo auto en el que se acepte la abstención de los dos magistrados citados y que será votado por el Pleno el día 8 de octubre.
Si se repite el resultado la presidenta y el vicepresidente del Constitucional quedarían apartados definitivamente de las deliberaciones del recurso del Partido Popular.