El Ministerio del Interior ha dicho que aprovechará el debate político de estos días, a pesar de la opinión de algunos miembros del Gobierno que, conscientes de la importancia de la medida, hubieran preferido alejar el debate de la campaña electoral para modificar aspectos importantes.
Los cambios se sustentarán en cinco bloques: la mejora de la gestión de los procedimientos, la lucha contra la inmigración ilegal, la trasposición de directivas de la Unión Europea, el cumplimiento de la Sentencia del Tribunal Supremo y la incorporación de los criterios de empadronamiento.
Estas medidas suponen un endurecimiento de los requisitos al obligar a los Ayuntamientos a cumplir la norma que les obliga a ser más rigurosos con los documentos que piden a los inmigrantes.