MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Según un comunicado de esta entidad, de acuerdo a la normativa vigente, el examen se contempla como una prueba "teórico-práctica" de respuestas múltiples. Si bien Conede señala que este planteamiento debió ser cambiado porque el resultado fue un examen "plenamente práctico sin tener en consideración a los estudiantes" que no tenían previsto este tipo de preguntas.
A su juicio, muchas de las cuestiones eran "ambiguas y carentes de una corrección formal y lingüística" e incluso con "una extensión fuera de lo razonable". Con todo ello, el organismo defensor de los derechos de los estudiantes de Derecho cree que "esta falta de rigor" ha producido una "desvirtuación total" de la prueba de acceso y una "alteración de las legítimas expectativas" de todos los aspirantes.
El Ministerio de Justicia convocó el pasado sábado la primera prueba de evaluación de aptitud profesional para el ejercicio de la abogacía del año 2019 a la que se presentaron más de 6.000 estudiantes. Debido a la alta participación se establecieron ocho centros en toda España para poder celebrar el examen.
75 PREGUNTAS EN 4 HORAS
El departamento que dirige Dolores Delgado explicó en un comunicado que la prueba, de cuatro horas de duración, se compone de un total de 75 preguntas de contenido teórico-práctico con respuestas múltiples. Las 50 primeras hacían referencia a materias comunes al ejercicio de la profesión y las 25 restantes estaban relacionadas con las especialidades de Derecho Civil y Mercantil, Penal, Laboral y Derecho Administrativo y Contencioso-Administrativo, entre las que los candidatos debían elegir una entre las cuatro opciones posibles.
Aunque Conede afirma que la redacción de las preguntas no depende exclusivamente de este Ministerio, se pone a su disposición y a "cuantas instancias resulten convenientes" para hacer una revisión del contenido del examen y verificar que las preguntas "concuerdan con las materias expresadas" en la convocatoria.
Según destaca en su nota, es necesario que "se clarifiquen y concreten exactamente los límites de la materia en los apartados del temario a evaluar en la prueba, con la finalidad esencial de facilitar a los estudiantes su preparación". "La prueba debe ceñirse al temario publicado y la legislación debe ser cumplida en todo momento", añade.
