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El PSOE ha logrado en el debate que los presupuestos del Gobierno cuenten con el mayor apoyo conseguido por un partido que no tiene mayoría absoluta en el Congreso.
Según el vicepresidente segundo y ministro de Economía, Pedro Solbes, este dato histórico presagia que, tras la negociación de las enmiendas parciales, se logrará aprobar “unos presupuestos claramente positivos para el país”.
Las enmiendas a la totalidad de los presupuestos, votadas en bloque, recibieron el rechazo de 183 diputados, frente al apoyo de 153 y la abstención de la única diputada de Nafarroa Bai.
Tras esta votación, a la que asistió el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, el proyecto de presupuestos pasará a debatirse en comisión, donde se incorporarán enmiendas parciales.
Será votado en el Congreso
El texto resultante será votado en el Congreso y posteriormente remitido al Senado.
Solbes recordó que las cuentas tratan de compatibilizar el equilibrio presupuestario con un “razonable” aumento del gasto centrado en los ámbitos productivo y social.
Además, destacó que estos presupuestos están encaminados a la progresiva reducción de la deuda pública, para cumplir el objetivo de situarla por debajo del treinta por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) al final de la legislatura.
Las cuentas, señaló, buscarán la misma estabilidad presupuestaria que hasta ahora ha regido la política económica del Gobierno.
En este sentido, insistió en que este año el superávit final del conjunto de las administraciones públicas será “claramente superior” al 0,1 por ciento del PIB, gracias a una evolución de la Seguridad Social “mejor de lo esperado” y la reducción del déficit de las comunidades autónomas tras la aportación del Estado para la Sanidad.
En su respuesta al portavoz de ERC, Joan Puigcercós, quien pidió medidas de apoyo para el sector textil y del calzado, el turismo y la industria, Solbes contestó que “en una economía abierta hay dificultades pero también ventajas” y la misión del Gobierno es “buscar el equilibrio y huir de modelos proteccionistas”.
No obstante, dijo que cuando se acometa la reforma del Impuesto de Sociedades el Gobierno analizará las propuestas de ERC para mejorar la competitividad de estos sectores dentro de las reglas de competencia.
Por otra parte, el ministro aseguró que, en materia de infraestructuras, las consignaciones de estos presupuestos son “más realistas” que en otras ocasiones, en las que se preveían más actuaciones de las que al final se ejecutaron.
