El estudio advierte de la existencia de problemas de índole jurídico y político para sacar adelante la propuesta del Lehendakari Juan José Ibarretxe. De un lado, está por determinar el procedimiento al que el articulado deberá ser sometido para su aprobación y, de otro, preocupan los obstáculos que puedan encontrarse en las instituciones que habrán de examinar y votar el proyecto, como son el Parlamento vasco y el Congreso de los Diputados.
Además, el estudio recomienda conseguir el apoyo de amplios sectores sociales, que compartan con los responsables políticos la necesidad de acometer la reforma del Estatuto de Autonomía, pues contribuiría a darle legitimidad democrática.
El estudio explica que deben evitarse las dudas en la ciudadanía pues, de lo contrario, la propuesta no saldría adelante.
Asimismo, el estudio observa lagunas legales en el proyecto. Ni el Estatuto actual ni el Reglamento de la Cámara del País Vasco establecen el procedimiento parlamentario que debe seguirse.