Elise Groulx aseguró que un colegio de abogados internacional independiente “ayudará a construir una comunidad jurídica viva” a la vez que preservará el buen funcionamiento de la profesión frente al Tribunal Penal Internacional.
Señaló, además, que la independencia es “un valor fundamental” para un órgano que trabaja alrededor del Tribunal Penal Internacional.
Elise Groulx añadió que la independencia del Colegio Penal Internacional, que se fundó en Berlín en marzo de 2003 como un órgano representativo de colegios de abogados y asociaciones jurídicas, garantizará los derechos humanos de sus representados frente al Tribunal Internacional.