El Plan de calidad aprobado el 15 de diciembre de 2000 abre un impulso de reforma y modernización de la Administración orientado a aproximarla a los ciudadanos de la Comunidad Autónoma.
En este contexto, se dicta el Decreto 9/2003, cuya finalidad es conocer desde la Administración las quejas y las iniciativas de sus usuarios.
Las quejas e iniciativas que regula el Decreto autonómico son un medio informal de comunicación entre los usuarios y la Administración, complementario a los procedimientos administrativos formales que se inician a instancia del interesado o a las denuncias.
El Decreto 9/2003 establece el régimen de quejas e iniciativas con el objetivo de facilitar su presentación por cualquier canal de comunicación y en cualquier soporte, y de asegurar el conocimiento por los órganos de dirección, así como una respuesta adecuada y rápida.