SANTIAGO DE COMPOSTELA, 14 (EUROPA PRESS)
Los jueces destacan que cinco testigos, las víctimas, sus acompañantes y el dueño del establecimiento en el que habían estado antes refirieron que el ataque fue "fulminante y sorpresivo, sin provocación previa por parte de los agredidos".
"Solo dio un puñetazo en el rostro de la persona que resultó gravemente lesionada, de ahí que la probabilidad de causación del resultado no era elevada, lo que permite hablar de un resultado posible, más que probable. Lo que permite atribuirlo a un comportamiento imprudente, no en la acción inicial causada, pero sí en el grave resultado finalmente producido", entiende el tribunal en la sentencia en la que condena al sospechoso como autor de tres delitos de lesiones, uno de ellos por imprudencia grave con resultado de lesiones graves.
Los magistrados descartan en la sentencia que el sospechoso actuase en legítima defensa o bajo los efectos del alcohol o de otro tipo de sustancias.