La Sala de lo Contencioso-administrativo del Tribunal lo ha establecida en una sentencia, que anula "por ser contrario al ordenamiento jurídico" el acuerdo del Consejo de Ministros que en 2008 denegó tal condecoración a la esposa de la víctima.
La víctima falleció a consecuencia de los disparos efectuados contra él por un cabo segundo en 1979 en la Cámara de Oficiales del Cuartel de Instrucción de la Zona Marítima del Cantábrico en Ferrol.
El Consejo de Ministros desestimó concederle la Gran Cruz porque en un informe del Ministerio del Interior se indicaba que no podía acreditarse la certificación de víctima del terrorismo.
Para el Tribunal, "existen elementos suficientes" para entender que el fallecimiento del capitán de Infantería de Marina se incluye en los supuestos amparados en la Ley de Solidaridad con las Víctimas del Terrorismo.