En base a este estudio el 63 por ciento consideran muy importante la existencia de dicho organismo y un 27 por ciento la creen importante.
Del estudio, realizado a través de entrevistas personales a una muestra de 2.493 personas de todo el Estado y de edades comprendidas entre los 18 y los 65 años, se desprende también que el 82 por ciento de los encuestados considera que su mejor protección como consumidor es informarse detenidamente antes de efectuar una compra.
El 65 por ciento manifiesta asimismo que no ha tenido en su vida ningún problema importante como consumidor, lo que supone una inversión de los datos obtenidos hace diez años, en 1994, en el que 6 de cada 10 encuestados aseguraba haber sufrido algún contratiempo destacable en sus compras.
En este mismo sentido, más de la mitad de los encuestados considera que hacer una reclamación sobre un problema de consumo es tan complicado que en general no se hace.
El 68 por ciento declara tener conocimiento de la existencia de organismos o instituciones dedicadas a la protección del consumidor. Ante esta misma pregunta, en el estudio realizado hace diez años sólo el 42 por ciento de los encuestados afirmaba conocer instituciones que le protegían como consumidores.