Los votos del PP y de CiU sirvieron para rechazar las propuestas de veto que el PSOE, PNV, IU y EA presentaron al texto y para sacar adelante el dictamen de la ponencia, con cinco modificaciones aceptadas al grupo catalán y dieciocho a los senadores del Partido Popular.
Las enmiendas introducidas por el Partido Popular, que no recibieron ningún voto en contra, se orientan en tres direcciones: crear mecanismos para evitar excarcelaciones indebidas de presos que aún no han sido juzgados; ampliar los juicios rápidos a delitos de daños, de piratería intelectual y venta callejera de drogas; y establecer la posibilidad de que los jueces obliguen a los sospechosos de delitos graves a someterse a la prueba del ADN.
Respecto a esta materia, se creará una Comisión Nacional sobre el uso forense del ADN, encargada de la acreditación de los laboratorios facultados para contrastar perfiles genéticos y de velar por su buen funcionamiento y su coordinación.