El Real Decreto 1000/2002 modifica la estructura orgánica del Ministerio de Administraciones Públicas y reforma el estatuto del Instituto Nacional de Administración Pública.
Las reformas que recoge el Real Decreto obedecen al significativo cambio de fisonomía producido en el Ministerio por la adscripción de las Delegaciones del Gobierno y la posterior integración de éstas en los servicios periféricos de la Administración General del Estado.
El Departamento ha registrado un incremento de los recursos gestionados, tanto materiales como humanos, y ha pasado de una estructura centralizada a una organización periférica, que ha dado lugar a un importante incremento de la carga de trabajo en las unidades que integran la Subsecretaría.
Las reformas del Real Decreto 1000/2002 están orientadas hacia un mayor grado de especialización de sus órganos directivos en las áreas consideradas prioritarias, como son las tecnologías de la información, la contratación y la gestión inmobiliaria.
Las funciones de la Subsecretaría del Ministerio de Administraciones Públicas quedan a partir de ahora distribuidas en cuatro unidades con rango de Subdirección General: Oficialía Mayor y las Subdirecciones de Tecnologías de la Información y Comunicaciones, de Administración Financiera y de Patrimonio Inmobiliario.
Las modificaciones que recoge el Real Decreto 1000/2002 sobre el estatuto del Instituto Nacional de Administración Pública son que éste Instituto deja de depender directamente del Ministro y queda adscrita al Ministerio por medio de la Secretaría de Estado para la Administración Pública y que se reestructura internamente, con el fin de acomodar su organización con las funciones que desempeña y optimizar los recursos disponibles.
