El acuerdo tiene como objetivo hacer un seguimiento de los procesos judiciales por malos tratos y de las Sentencias dictadas por los Tribunales.
Según el Poder Judicial, con la celebración de este acto no sólo da comienzo de manera formal a las actividades de este observatorio, sino que supone “una toma de posición, por parte de todos los poderes públicos, en su compromiso de lucha contra esta grave forma de violencia”.
El Plan se completa con medidas policiales, la más importante la creación de patrullas especiales de atención permanente de proximidad que permitan identificar las posibles situaciones de riesgo y evitar nuevas o repetidas agresiones.
Del mismo modo, la Guardia Civil extenderá sus equipos provinciales de atención a mujeres y menores víctimas de delito al ámbito comarcal, mientras que los servicios policiales de atención a la familia se implantarán en todas las comisarías provinciales.
Finalmente, se habilitarán teléfonos de atención inmediata y se darán cursos a abogados y funcionarios judiciales y policiales sobre cómo atender a las víctimas.