VITORIA, 27 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Álava condenó a prisión permanente revisable a Daniel M., un exprofesor de música sevillano, por el asesinato de la bebé Alicia, a la que lanzó por la ventana de una vivienda de Vitoria el 25 de enero de 2016.
El tribunal consideró que no había quedado probado que este joven, cuya defensa reclamaba la eximente completa por enajenación mental, tuviera "anulada" su capacidad de raciocinio ni sufriera "delirios" cuando mató a la niña.
También fue condenado a siete años y medio de cárcel por el intento de homicidio de Gabriela, la madre de la bebé, que tenía 17 años en el momento de los hechos y a la que había conocido semanas antes del trágico suceso.
Según el fallo que se ha dado a conocer este jueves, el Tribunal Superior de Justicia ha desestimado los dos motivos del recurso de apelación interpuesto por la defensa de Daniel M., quien alegó vulneración del principio de presunción de inocencia y del derecho a la tutela judicial efectiva.
El Tribunal, sin embargo, considera que existe suficiente prueba de cargo como para probar que el acusado tenía intención de matar, no de lesionar como mantiene la defensa. Respecto al segundo de los motivos, estima "suficientes" las razones del veredicto y la sentencia rechazando de nuevo la posible existencia de una enfermedad que alterara la voluntad del acusado.
Para José Miguel Fernández, delegado de la Asociación Clara Campoamor en Euskadi, que se encuentra personada en la causa como acusación popular, esta sentencia "confirma que el veredicto del jurado fue intachable y que la condena a prisión permanente revisable es totalmente justa para éste y todos los asuntos tan graves como éste que, por desgracia, llenan nuestras noticias casi todas las semanas".
Tras recordar que actualmente la reforme legal que introduce la pena de prisión permanente revisable en el Código Penal se encuentra recurrida ante el Tribunal Constitucional, la asociación ha afirmado que espera que se mantenga esta pena porque "la ley y la Justicia tienen la obligación de responder ante este tipo de delitos, tal y como ya lo está haciendo la inmensa mayoría de nuestra sociedad, saliendo a la calle para manifestarse masivamente en contra de esta lacra".
Se trata de la primera y única condena de prisión permanente revisable en Euskadi. La defensa de Daniel M. puede recurrir la sentencia en casación ante el Tribunal Supremo.