El dictamen también indica que las uniones entre homosexuales requieren de una Ley diferente a la que actualmente regula el matrimonio entre hombres y mujeres.
El Consejo de Estado insiste en que ese tipo de uniones constituye una realidad distinta al matrimonio heterosexual, por lo que necesita de un tratamiento jurídico específico.
De esta forma, el máximo órgano consultivo del Gobierno responde a la consulta del Ejecutivo, que le remitió un Proyecto de Ley de reforma del Código Civil para poder reconocer el matrimonio entre personas de igual sexo.
El Gobierno optó por no solicitar informe sobre dicha reforma al Consejo General del Poder Judicial, dado que consideró que no era necesario al plantear modificaciones en artículos concretos del Código Civil.