Así lo informó ayer el portavoz del Consejo, Enrique López, al término de un Pleno extraordinario del Consejo General del Poder Judicial, quien explicó que este órgano también ha tomado conocimiento del cese de Jesús Cardenal como fiscal general, comunicado por el Gobierno.
Los dos requisitos que establece la Ley 50/1981, de 30 de diciembre, del Estatuto orgánico del Ministerio Fiscal para acceder al cargo de fiscal general es ser un magistrado de reconocido prestigio y tener más de 15 años de ejercicio efectivo de su profesión, lo que cumple Cándido Conde-Pumpido, actualmente magistrado de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo.
El portavoz del Consejo General del Poder Judicial insistió en que el pleno se ha ceñido exclusivamente a dar respuesta al “oficio remitido por el Ministerio de Justicia solicitando el preceptivo informe sobre el cese y posterior nombramiento del futuro fiscal general del Estado”.
Cándido Conde-Pumpido, licenciado en Derecho y en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad de Santiago de Compostela, ingresó en la carrera judicial en 1973 y desde 1995 ejerce como magistrado de la Sala Segunda del Tribunal Supremo.
Fue fundador de la asociación Jueces para la Democracia, donde ocupó el cargo de portavoz en dos ocasiones y ha escrito numerosas publicaciones, siendo también profesor de Derecho Civil en las Universidades del País Vasco y en el Colegio Universitario de Segovia adscrito a la Universidad Complutense.