El director de la Agencia Tributaria, Luis Pedroche, ha asegurado que el nuevo Plan de Prevención del Fraude Fiscal de Hacienda pretende limitar a dos años las comprobaciones fiscales que se realizan a los contribuyentes para detectar algún tipo de fraude. El plazo es dos años menor a los cuatro años que la ley permite investigar actualmente (periodo a partir del cual prescribe la infracción).
Luis Pedroche señaló que el objetivo de esta reforma es conseguir que las comprobaciones alcancen al mayor número de contribuyentes posible, en vez de que se centren en el seguimiento de más años, pero de un menor elenco de declarantes de los impuestos.
El director de la Agencia Estatal de Administración Tributaria añadió que se trata de “reducir el número de ejercicios fiscales que van a ser objeto de inspección” para cada contribuyente, con el propósito de “acercar lo máximo posible las actuaciones inspectoras al momento en el que se realizó el devengo del impuesto” en cuestión.
En cualquier caso, aseguró que las comprobaciones limitadas a dos ejercicios serán la norma con carácter general, pero afirmó que, “en el caso de que el inspector sospeche que el contribuyente ha cometido delito fiscal más allá de los dos últimos años, la inspección se seguirá realizando sobre los cuatro años” en los que el presunto delito aún no ha prescrito.