La sala entiende que los hechos denunciados en relación a la prohibición de una manifestación en Bilbao el pasado mes de septiembre contra la suspensión de actividades de Batasuna ni siquiera indiciariamente son constitutivos de delito.
La resolución del Juez consideraba ilícita la concentración de Bilbao por ser contraria a la suspensión de actividades de Batasuna. El Ejecutivo vasco consideró que Baltasar Garzón, mediante un procedimiento jurídicamente impreciso, impulsó una actuación materialmente injusta como es impedir el derecho de reunión.
Sin embargo, el Tribunal Supremo ha rechazado la querella por considerar que la decisión de Baltasar Garzón fue razonable al prohibir la manifestación ya que aparecían como portavoces de la iniciativa personas que podían estar relacionadas con organizaciones investigadas por su relación con actividades terroristas.